El Sumo Pontífice, de 82 años, se resbaló al salir de su cuarto de baño y debió ser intervenido en una clínica de la localidad italiana de Aosta, de donde ya fue dado de alta. El Papa Benedicto XVI, de 82 años, fue intervenido hoy en la ciudad Aosta, al norte de Italia. La operación fue para subsanar la fractura de su muñeca derecha ocurrida tras una caída al salir de su cuarto de baño el jueves por la noche.
La intervención terminó y “salió bien”, declaró el presidente de la región del Valle de Aosta, Augusto Rollandin, según informaron los medios de comunicación italianos. Trascendió también que el Papa fue operado con anestesia local y no con anestesia general, como se informara inicialmente.
Tiziano Trevisan, portavoz del hospital Umberto Parini, donde está intervenido el Sumo Pontífice, declaró a la agencia AFP que “salvo una contraindicación, el Papa podría salir a últimas horas de la tarde o al anochecer”.
NO SE DIO CUENTA. Ni bien ocurrió el accidente el Papa no habría presentado molestias, incluso, según informó el Vaticano, Benedicto XVI “celebró misa y desayunó” antes de acudir al hospital, donde le “fue diagnosticada una pequeña fractura de la muñeca, que fue inmovilizada”.
Fue el creciente dolor lo que lo llevó al centro de salud donde el Sumo Pontífice ingresó caminando. “No hay ninguna razón para preocuparse. No hay nada grave”, indicó su portavoz, el padre Federico Lombardi.
0 comentarios:
Publicar un comentario