El presidente Álvaro Uribe se refirió a los lanzacohetes antitanque incautados a la guerrilla que, de acuerdo a una revista, podrían haber sido vendidos originalmente a Venezuela.“Sabemos que los grupos terroristas (las guerrillas) han adquirido lanzacohetes de marca en los mercados internacionales de armas, en la comunidad internacional. Colombia lo sabe”, dijo Uribe en un acto público en la ciudad de Medellín (450 km al noroeste de Bogotá).
Indicó que su gobierno ya presentó la “queja a través de los canales diplomáticos a los respectivos países”, pero se abstuvo de mencionarlos.
La semana pasada en Londres, la revista especializada en defensa Jane’s, reveló que el ejército colombiano se incautó de un número indeterminado de lanzacohetes antitanque en campamentos de las FARC que podrían haber sido vendidos originalmente por un fabricante sueco al ejército de Venezuela.
La publicación inglesa precisó que los artefactos serían del modelo AT4, fabricado por la compañía sueca Saab Bofors Dynamics.
¿CONEXIÓN VENEZOLANA? Este domingo, la revista colombiana Semana que entró en circulación, en un artículo titulado “Los “rockets” venezolanos”, dice que desde hace casi dos meses, Bogotá puso en conocimiento de Caracas de la incautación a las FARC de “varios lanzacohetes AT-4”, pero que hasta ahora no ha recibido respuesta.
De acuerdo con Semana, los funcionarios venezolanos se comprometieron a realizar una investigación para tratar de explicar al gobierno colombiano cómo había terminado material de guerra reservado del ejército venezolano en manos de las FARC.
Los lanzacohetes fueron encontrados por el Ejército en julio de 2008 en un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas), según puntualiza el artículo.
Tras el hallazgo, el gobierno colombiano entró en contacto con el gobierno de Suecia, cuya embajada en Bogotá confirmó hace más de tres meses que los números de serie de los lanzacohetes corresponden a un lote que vendió la empresa sueca al ejército de Venezuela, añadió la revista.
Semana dijo que se habló con diplomáticos de la embajada de Suecia en Bogotá que declararon que están “muy preocupados por esa situación”, y aseguraron que “el gobierno de Suecia está colaborando activamente en la investigación”.
La revista recordó correos electrónicos que al respecto fueron encontrados en computadores de Raúl Reyes, segundo al mando de las FARC muerto por el ejército colombiano en un bombardeo a un campamento en el que se encontraba en territorio de Ecuador, el 1 de marzo de 2008.
LOS CORREOS. Tras reproducir algunos de esos correos que Reyes se cruzó con el entonces líder de las FARC, “Manuel Marulanda” y el secretariado (cúpula) del grupo, Semana señaló que en ellos “se evidencia, entre otros, los estrechos vínculos de colaboración económica, política y militar de funcionarios y militares del gobierno de Hugo Chávez con la guerrilla colombiana.
“Como estaba previsto, el 3 de enero (de 2007) me reuní con los generales (Cliver) Alcalá y (Hugo) Carvajal con el cual ya me había reunido en tres ocasiones (.....), nos van a hacer llegar (la próxima semana) 20 bazucas (no recuerdo el calibre) de gran potencia, según ellos (...)”, reza uno de los correos que Reyes recibió el 4 de enero de 2007 de “Iván Márquez”, miembro de la cúpula de las FARC.
La denuncia del presidente Uribe que colocó en colocó ante la comunidad internacional el caso de los lanzacohetes AT-4 incautados a las FARC, se produce en momentos de una nueva tensión con Venezuela por el acuerdo militar que Colombia está negociando con Estados Unidos para el uso de bases.
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