Las fuentes de Inteligencia pakistaníes y estadounidenses prefieren no cantar victoria respecto al posible fallecimiento de Baitulá Mehsud, debido al ataque de un misil disparado por un avión no tripulado.Los servicios de Inteligencia de Pakistán afirmaron tener información sobre la posible muerte de Baitulá Mehsud, jefe de los talibanes paquistaníes, provocada por un supuesto disparo de un misil estadounidense. De ser conformida, sería un triunfo para Islamabad y Washington en su lucha contra los islamistas en dicho país.
Responsables paquistaníes y habitantes de Waziristán del Sur, región tribal semiautónoma fronteriza con Afganistán, afirmaron que Mehsud había fallecido el miércoles junto con su esposa, cuando un avión sin piloto estadounidense disparó dos misiles contra su casa.
“Según mis datos, esa información es correcta, pero para estar seguros al cien por ciento debemos verificar sobre el terreno”, declaró a la prensa el ministro paquistaní de Relaciones Exteriores, Shah Mahood Qureshi.
“Informaciones de que está muerto están llegando desde esa zona”, añadió por su parte el ministro del Interior, Rehman Malik, al declararse, sin embargo, “incapaz de confirmarlo hasta que no tenga pruebas sólidas”.
Por su parte, la Casa Blanca no pudo confirmar la muerte de Mehsud, pero subrayó que numerosas fuentes creíbles indican que murió, según el portavoz Robert Gibbs.
“No podemos confirmar si está o no muerto”, dijo desde Washington, al agregar que, no obstante, “parece existir un creciente consenso entre observadores creíbles en que, efectivamente, está muerto”.
Estados Unidos ofreció cinco millones de dólares por la captura vivo o muerto de Mehsud, en tanto que el gobierno paqusitaní prometió una recompensa de 615.000 dólares. Washington lo considera como “un facilitador de Al Qaida” en la región tribal de Waziristán del Sur.
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